jueves 24 de abril de 2025 16:06 pm
Search
El aroma de la verdad te despertará cada mañana!
PATROCINADOR OFICIAL

Versículo del Día: Isaías 41:10 (Reina-Valera 1960) «No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.»

Explicación del Versículo: Este pasaje es una de las promesas más poderosas y reconfortantes de la Biblia. Dios habla directamente a su pueblo, asegurándole que no hay razón para temer. No es una sugerencia, sino un mandato lleno de ternura: «No temas», porque Dios mismo está presente en nuestras vidas. Él no envía a alguien más, no delega su compañía: Él mismo camina con nosotros.

La frase «no desmayes» apunta a esos momentos en que las fuerzas flaquean y sentimos que ya no podemos continuar. Pero justo ahí, Dios dice: «Yo soy tu Dios que te esfuerzo». Él es la fuente de nuestra fuerza, no nosotros mismos. Nuestra capacidad no viene de lo que podemos lograr, sino de lo que Él hace en nosotros.

La declaración «siempre te ayudaré» elimina cualquier duda. No hay condición. No dice «si te portas bien» o «si oras lo suficiente». Dice siempre. Y remata con una imagen firme: «te sustentaré con la diestra de mi justicia», lo que significa que seremos sostenidos por su mano poderosa y justa. Dios no solo nos ayuda, sino que lo hace con justicia, defendiendo lo correcto, protegiéndonos de la injusticia y guiándonos por el camino correcto.

Reflexión: A veces el miedo toca a la puerta de nuestro corazón disfrazado de preocupación, ansiedad o incertidumbre. Este versículo es como un escudo que nos recuerda que Dios no abandona a los suyos. En medio de las dificultades, cuando todo parece desmoronarse, cuando nuestras propias fuerzas ya no alcanzan, Él promete estar ahí, fortalecer, ayudar y sostener.

Hoy puedes caminar sin temor. No porque todo esté bajo control, sino porque Dios está contigo. No porque seas fuerte, sino porque Él te fortalece. No porque no falles, sino porque Él no falla.

Descansa en esta promesa. Escríbela en tu corazón. Recuérdala cuando el día se ponga difícil.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *