Un estudio reciente publicado en la revista Science Advances ha revelado que una proteína, denominada CANYA, puede agregar los años de las proteínas. Este descubrimiento es fruto de una colaboración entre el Centro de Regulación Genómica (CRG) y el Instituto de Bioingeniería de Cataluña (IBEC).
Contexto del Estudio
El estudio explica el funcionamiento de esta herramienta de inteligencia artificial que utilizaba las proteínas para decidir si estaban «agregadas». Los resultados mostraron que las proteínas «agregadas» eran en realidad proteínas «pegajosas» o «motivas».
Impacto y Beneficios
El descubrimiento de CANYA abre nuevas posibilidades en la traducción del lenguaje secreto de las proteínas. La investigación fue posible gracias a un gran conjunto de datos sobre agregación de proteínas, que incluía más de 500 millones de personas en todo el mundo, convirtiéndose en un hito en la historia de la proteínica.
Desafíos y Limitaciones
Aunque el estudio puede acelerar los esfuerzos en la investigación de proteínas, los datos sobre la agregación de proteínas han sido históricamente escasos o se han limitado a fragmentos muy pequeños. Los autores del estudio crearon más de 100.000 fragmentos de proteínas completamente aleatorios desde cero, cada uno de 20 aminoácidos de longitud.
Impacto en la Biotecnología
El descubrimiento ha sido posible gracias a la mayor colaboración entre el CRG y el IBEC, y el estudio ofrece nuevos conocimientos sobre los mecanismos moleculares que causan la agregación de proteínas. Cuando ciertas partes de las proteínas se adhieren entre sí, se convierten en masas densas y fibrosas, perdiendo su función normal.