La ex primera dama peruana Nadine Heredia, condenada a quince años de prisión junto con su esposo, el expresidente Ollanta Humala, llegó este miércoles a Brasilia, amparada por el asilo diplomático concedido por el Gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva.
Heredia viajó en un avión de la Fuerza Aérea Brasileña (FAB), enviado a Lima tras la concesión del salvoconducto por parte de las autoridades peruanas, negociado con el Gobierno brasileño.
La ex primera dama fue sentenciada a prisión el martes y, poco después, se presentó en la embajada brasileña en Lima para solicitar asilo, el cual fue concedido de inmediato.
Heredia llegó a la capital brasileña acompañada por uno de sus hijos, Samir, quien también recibió asilo diplomático. Aún no se sabe si se establecerá en Brasilia o en otra ciudad del país.
Humala y su esposa fueron condenados por una trama de corrupción y lavado de dinero en campañas electorales, que involucró a la empresa brasileña Odebrecht y aportaciones ilícitas del fallecido expresidente venezolano Hugo Chávez.
El expresidente fue arrestado el mismo martes y será recluido en el penal limeño de Barbadillo, donde también cumplen condena los exmandatarios Alejandro Toledo y Pedro Castillo, el primero por escándalos relacionados con Odebrecht y el segundo por intentar disolver el Congreso en 2022.
El presidente Lula también enfrentó una condena y pasó 580 días en prisión por supuestas corruptelas vinculadas a Odebrecht, aunque su juicio fue finalmente anulado por la Corte Suprema de Brasil debido a irregularidades procesales.
Brasil tiene una sólida tradición en materia de asilo y ha acogido a numerosas autoridades de diversos países. Uno de los casos más destacados fue el del exdictador paraguayo Alfredo Stroessner, quien gobernó entre 1954 y 1989 y se asiló en Brasilia tras ser derrocado, donde murió en agosto de 2006.
Otros políticos paraguayos que recibieron asilo en Brasil incluyen al expresidente Raúl Cubas, quien renunció en 1999, y al exgeneral Lino Oviedo, acusado de intentar un golpe de Estado en 1996.
El expresidente ecuatoriano Lucio Gutiérrez también se asiló en Brasil tras ser destituido en 2005.
Fiel a su tradición diplomática, Brasil asumió la custodia de la embajada peruana en Caracas en 2022, después de que los diplomáticos peruanos fueran expulsados de Venezuela tras el polémico proceso electoral que confirmó a Nicolás Maduro en el poder.
En Caracas, Brasil también asumió en agosto la custodia de la residencia de la embajada argentina, donde cinco opositores permanecen asilados desde hace más de un año, sin haber obtenido el salvoconducto necesario para abandonar el país. Venezuela revocó la autorización para esa custodia en septiembre, pero Brasil la mantiene mientras Argentina no designe a otro Estado para hacerse cargo.
